Cuentos del Coronavirus

El  Rey  Coronavirus

Una vez hubo un virus, que se convirtió en rey en un pueblo ya que poseía el poder de hechizar a quienes se acercaban a él, era el poder de su gran corona, por eso se llamó "Coronavirus".

Era muy malvado porque con su hechizo logró llevar a casi  todos a su gran castillo para que no trabajaran y cuidaran el reino y los aisló de sus familiares y amigos. Principalmente los mayores del reino por su sabiduría y conocimiento.

En el castillo todos estaban muy sucios porque al Rey Coronavirus no le gustaba que la gente se lavara para estar limpia y cuidada.

Los habitantes de la ciudad descubrieron que para no ser hechizados al salir de sus casas tenían que usar guantes y bufandas que les cubriera la boca y por lo tanto, no ser llevados al castillo del Rey Coronavirus.

Un día, los hechiceros de la ciudad que evitaron estar aislados en el castillo, molestos por la situación, se unieron para crear una poción que pudiera ayudarlos a luchar contra el Rey Coronavirus, derrotarlo y todos seguirían felices.

 Después de seis meses de duro trabajo escondidos en las profundidades de la tierra, para que el rey no los descubriera y los llevara a su castillo para permanecer encerrados durante 14 días esperando a ver qué  hacían con ellos.

Después de muchas pruebas y experimentos mezclando muchas especias mágicas y productos químicos, finalmente descubrieron una crema que podría vencer el hechizo del Rey Coronavirus.

Los ingredientes eran muy peculiares y diferentes de otras cremas:

- Gotas de valor

- Una pizca de risa

- 1 litro de trabajo en equipo

- Polvo de responsabilidad

- 10 gramos de alegría

- 5 kilos de abrazos

- Especies musicales

- Litros de tolerancia

- Kilómetros de respeto

Y lo más importante: ... mucho mucho  AMOR.

Como resultado, obtuvieron Crema de Esencia de Unión.

Los hechiceros comenzaron a distribuir la crema a la gente y dijeron que, como condición, tenían que frotarse cuidadosamente para que libere una energía entre todos los ciudadanos que derrotaría al Rey Coronavirus.

Cuando todas las personas usaron la crema, se liberó tanta energía positiva que limpió todo lo que había alrededor, dentro y fuera del castillo.

El Rey Coronavirus comenzó a sentirse mal de inmediato y se puso tan grave que comenzó a encogerse y encogerse hasta que desapareció  con su hechizo.

Desde entonces, en la ciudad, aplauden a los hechiceros  todos los días a las ocho de la tarde, el momento en que el Rey  Coronavirus desapareció.

FIN

Juan Muñoz Pérez 6ºB